Cuando una relación llega a su fin, se comienzan a cerrar varios ciclos. Algunos de ellos emocionales, otros físicos e incluso legales. Una separación puede ser un proceso difícil y doloroso, sin embargo también puede llegar a ser una solución que regrese la tranquilidad a la vida de los involucrados.
Cuando la pareja estaba legalmente casada, se habla de un divorcio. En este caso es necesaria la intervención de un abogado y un juzgado familiar para llevar a cabo la disolución del contrato matrimonial, entre otras cosas. La mayoría de los divorcios son de mutuo acuerdo, sin embargo, también se puede dar cuando solo una de la partes lo solicita. Cuando la pareja tiene hijos, el proceso puede ser más complicado, tanto emocional como legalmente. Lo mismo cuando la pareja tiene bienes mancomunados (como una casa, por ejemplo).
Por otro lado, una separación es más simple que un divorcio. Casi nunca es necesaria la intervención de un abogado y suele ser un proceso más fácil y rápido.
Separación | Divorcio | |
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Definición | Cuando una pareja decide terminar una relación se habla de una separación. Una pareja que se separa no está casada. De hecho la mayoría de las parejas que se separan ni siquiera viven juntos (unión libre). La gran mayoría de las separaciones se da entre parejas de novios. | El divorcio es un procedimiento legal mediante el cual se finaliza un matrimonio. |
¿Estuvieron casados? | No necesariamente. Sin embargo, si una pareja casada deja de vivir juntos y terminan la relación sentimental antes de divorciarse, es una separación. | Si. Esto debido a que un divorcio no solo involucra una separación, sino además la disolución del matrimonio legal. |
Estado civil previo | Unión libre o soltero (en un noviazgo o compromiso de matrimonio) | Matrimonio |
¿Hay hijos? | Puede haber hijos o no. | De la misma forma, pueden haber hijos o no. |
¿Es necesario contratar a un abogado? | Si no existen dudas en cuanto a alguna propiedad, por ejemplo, no es necesario contar con un abogado. | Si existe un matrimonio civil, si. Es necesario en primer lugar disolver el “contrato” matrimonial. Después, en caso de existir bienes mancomunados (ambos son dueños) es necesario repartirlos. Además cuando hay hijos, la custodia debe ser repartida como corresponda y las obligaciones de ambos padres deben quedar establecidas. |
Causas | Una relación puede terminar por varias razones. Entre las más comunes están:
| Las causas más comunes de un divorcio son las siguientes:
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Dificultades | Una de las dificultades más comunes al terminar una relación, reside en los círculos sociales de los afectados. Muchas veces es necesario dejar de ver a ciertas personas, cambiarse de casa, buscar nuevos amigos, etc. | En cuanto al divorcio, una de las repercusiones más comunes, es en lo económico. Cada una de las dos partes debe adaptarse a una nueva vida. A veces las mujeres deben buscar un empleo pues ya no dependen económicamente de nadie. |
Tipos | Básicamente existen sólo dos tipos de separaciones:
| Existen tres tipos de divorcios:
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Respuestas emocionales | Las personas que pasan por un rompimiento pueden experimentar desde una simple tristeza hasta depresión. Suele existir algún grado de ansiedad. También hay melancolía, desolación, rabia, miedo y aislamiento. Se considera sano sentir alguna o todas ellas, es parte del proceso adaptativo. Sin embargo, en caso de que persistan es recomendable visitar a un experto en salud mental, como un psicólogo. | Depresión, ira, angustia, melancolía, ansiedad, inseguridad, miedo, culpa, etc. También se considera normal sentirlas. Es parte del duelo por la relación fallida. Se recomienda rodearse con un fuerte sistema de apoyo (familia y amigos). También se puede visitar a un psicólogo, sólo para no permitir que las emociones tomen el control de la vida de la persona en duelo. |
Respuestas físicas | Llanto, falta de sueño, estrés y falta de apetito, entre otras. | De la misma forma, se puede experimentar llanto incontrolable, insomnio, estrés, inapetencia, etc. |