Cuando se trabaja en un proyecto académico, e incluso de otras naturalezas, uno de los primeros y más importantes pasos a tomar es la delimitación de los objetivos generales y de los objetivos particulares o específicos. Los objetivos en general sirven al propósito de delimitar el alcance esperado del proyecto. De ahí la importancia de que estos sean establecidos como parte de la planeación previa a la ejecución (hipotética o real) del proyecto.
Objetivos generales | Objetivos particulares (específicos) | |
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¿Qué es? | Por lo general solo hay uno o un par de estos en cada proyecto. El objetivo general describe la meta a la que un proyecto desea llegar. Este da una vista general del panorama desde el punto de llegada. | Para lograr los objetivos generales, es necesario que existan los objetivos particulares. El cumplimiento de cada uno de estos ayudará a la conformación del todo que, en este caso, son los objetivos generales. |
Delimitaciones | El o los objetivos generales son centrales. Se enfocan en la idea detrás del proyecto. El proyecto de hecho se desenvolverá alrededor de los objetivos generales. Cada paso se planificará con la intención de alcanzarlos o probarlos. | Evidentemente, los objetivos particulares son más detallados, más enfocados hacia algunos aspectos no tan centrales como aquellos de los objetivos generales. No obstante, los objetivos particulares son tan importantes como los generales. |
Contenido | Dentro de los objetivos generales se incluye la idea central del trabajo. Asimismo, se incluye la finalidad del trabajo, es decir, por qué se está llevando a cabo. Finalmente, se debe incluir lo que se pretende probar a manera de hipótesis. | En cuanto a los objetivos específicos, se deben incluir cada uno de los pasos necesarios para alcanzar el objetivo general. Cada posible variable debe ser contemplada. Es importante no dejar de lado ningún detalle, pues de eso van los objetivos particulares, de los detalles que darán forma al proyecto. |