Prejuicio
Un prejuicio es una opinión formada sobre algo o alguien anticipadamente. Los prejuicios son “peligrosos”, pues alteran la percepción de las personas, y, al ser acciones inconscientes, resultan difíciles de cambiar. Los prejuicios son siempre juicios negativos que involucran sentimientos como la antipatía, el desprecio y el miedo, entre otros. Cuando una persona está formando su propia identidad, es decir, a partir de la infancia, se forman los prejuicios desde algunos análisis valorativos que nacen de mitos, tradiciones y costumbres, e incluso de la historia de lo que le rodea. La “finalidad” de los prejuicios es detonar el sentimiento de pertenencia a un grupo social, pudiendo así descartar, favorecer o dominar a otras personas sin que exista remordimiento.
Al tratarse de prejuicio contra una persona o un grupo de personas, el prejuicio va ligado íntimamente a la discriminación.
Ejemplo: Hoy en día no es raro encontrar personas en Estados Unidos con prejuicios contra los “mexicanos” (incluidos en esta categoría los centroamericanos e incluso sudamericanos). Entre sus ideas más comunes se encuentran que son flojos, violentos, agresivos, oportunistas, etc.
Discriminación
En cuanto a la discriminación, se trata de una acción u omisión en contra de una persona o grupo de personas. La discriminación produce desigualdad pues se genera a partir de la “necesidad” de separar a algunas personas de otras. No siempre se trata de tomar acciones violentas o definitivas contra alguien, con el simple hecho de tratarle diferente basta. Esto se conoce como consideración desventajosa. Incluso se puede decir que la discriminación es un prejuicio vuelto acción.
Ejemplo: Alrededor de todo el mundo existe discriminación en contra de las personas de raza negra (misma situación en contra de los latinos, los asiáticos, los homosexuales, las mujeres, etc). En algunos países se encuentran cerca de eliminarla, en otros ni siquiera se han dado cuenta del problema.
A la discriminación racial se le conoce como racismo.
Racismo
Finalmente, el racismo es el sentimiento de “orgullo racial” que un grupo étnico siente (aunque también puede darse en individuos), y que provoca discriminación en contra de otros grupos étnicos. El racismo se basa en la falsa doctrina de superioridad racial. Cuando es puesto en práctica, existe exclusión, restricciones y preferencias basadas estrictamente en razones como la raza, el color, el linaje y las raíces étnicas del grupo menoscabado. El racismo es una práctica peligrosa, condenable e injusta. Históricamente, el racismo no solo ha llevado a la segregación, sino también al exterminio de algunos grupos étnicos.
Ejemplo: Las leyes de Jim Crow en Estados Unidos, las cuales tuvieron como finalidad la separación de personas de ascendencia africana de las personas de ascendencia anglosajona de varios aspectos cotidianos, como el transporte público, los locales comerciales, las escuelas, etc. Su lema fue “Separados pero iguales”.
Referencias