Antisepsia es la prevención de enfermedades de tipo infecciosas mediante la destrucción de los microorganismos patógenos que las producen. Esta es llevada a cabo mediante el uso de medicamentos o sustancias químicas (comúnmente llamados antisépticos) que tienen la finalidad de inhibir el crecimiento y destruir o disminuir el número de microorganismos de la piel, mucosas y cualquier otra superficie animada, o tejido vivo. En otras palabras, es la ausencia de sepsis (microorganismos capaces de producir putrefacción y/o infección).
Todos los procedimientos que conforman a la antisepsia tienen la finalidad de evitar o atenuar el riesgo de infección en cualquier procedimiento quirúrgico. Por ejemplo, en una cirugía, se aplica la antisepsia antes de operar. Para esto se limpia la piel alrededor del área a intervenir con algún compuesto yodado usualmente.
En el ámbito de la salud, este término, junto con el de asepsia, es muy importante. Sin embargo, aunque son conceptos muy similares que además guardan una relación muy cercana, cada uno corresponde a un proceso o método distinto.